Enfisema
Dentro de los pulmones hay muchos tubos ramificados (bronquiolos) que permiten el movimiento del aire. Al final de estos bronquiolos hay pequeños sacos en forma de globo llamados alvéolos. Al inhalar, los alvéolos se llenan de aire fresco.
El enfisema pulmonar es una enfermedad pulmonar crónica que daña los alvéolos. Las paredes de los alvéolos se debilitan, se rompen y se vuelven flácidas. El aire viejo queda atrapado, lo que dificulta cada vez más la respiración.



Síntomas del enfisema
Los síntomas del enfisema tienden a desarrollarse gradualmente con el tiempo. Pueden ser leves al principio, o puede descartarlos como una parte natural del envejecimiento. Sin embargo, el enfisema es una afección médica grave que no debe ignorarse.
Síntomas comunes
Debe hablar con su médico de inmediato si experimenta lo siguiente:
- Opresión en el pecho.
- Tos crónica.
- Sensación de que no puede tomar suficiente aire.
- Fatiga continua.
- Dificultad para respirar, especialmente cuando se realizan actividades físicas.
- Sibilancias, un silbido agudo que se produce al respirar por la nariz o la boca.
En casos graves
Si tienes enfisema grave, también puedes experimentar:
- Cofre del cañón: Los pulmones se inflan crónicamente con aire porque no puedes exhalar de manera efectiva. Esto puede dar la apariencia de un ligero pecho de barril.
- Clubbing: Las yemas de los dedos parecen redondeadas
- Respiración con los labios fruncidos.
Estos síntomas no significan necesariamente que tenga enfisema. De todos modos, debe hablar con su médico para que pueda obtener un diagnóstico.
Busque atención médica de emergencia si usted o alguien que conoce:
- Está/no está mentalmente alerta o confundido.
- Tiene o tiene tanta dificultad para respirar que no puede subir escaleras.
- Tiene uñas que se vuelven azules después de la actividad física.
- Tiene dificultad para respirar acompañada de dolor en el pecho, dolor en la mandíbula o en el brazo.

Causas y factores de riesgo
Causas
El enfisema, al igual que la bronquitis crónica y otras enfermedades relacionadas con la EPOC, es causado en gran medida por el tabaquismo excesivo.
El humo del cigarrillo irrita y daña el tejido frágil y elástico de las vías respiratorias y los alvéolos. Las sustancias químicas del humo del cigarrillo también son tóxicas para las células. El tabaquismo es el principal culpable del enfisema y la EPOC.
Otras causas de enfisema incluyen:
- Exposición a la contaminación del aire.
- Exposición a productos químicos, humos e irritantes pulmonares en el trabajo.
- Fumar marihuana en exceso.
- Exposición prolongada al humo de segunda mano, por ejemplo, al vivir con alguien que fuma.
- Fumar productos de tabaco usando una pipa, cigarro u otros medios.
En casos raros, la causa es una deficiencia hereditaria de una proteína importante que protege los alvéolos. Esto se denomina enfisema por deficiencia de alfa-1 antitripsina.
Factores de riesgo
Un factor de riesgo es cualquier cosa que aumente la probabilidad de desarrollar una afección. Los factores de riesgo del enfisema incluyen los siguientes:
- Tabaquismo. El tabaquismo es la causa principal del enfisema, y la mayoría de los pacientes con enfisema tienen antecedentes de tabaquismo. Su riesgo aumenta con cada año adicional de tabaquismo.
- Exposición al humo de segunda mano. El humo de segunda mano es el humo que se inhala accidentalmente del cigarrillo o del humo del tabaco de otra persona. Si vive con alguien que fuma, tiene un mayor riesgo de enfisema
- Exposición a humos en el trabajo. Trabajar con productos químicos y humos, o si trabaja con algodón, madera o productos de minería, puede exponerlo a irritantes pulmonares.
- Vivir con la contaminación del aire. Respirar constantemente aire contaminado puede aumentar el riesgo de enfisema. La contaminación del aire puede ser causada por fuentes interiores, como el combustible para calefacción, o contaminantes exteriores, como los gases de escape de los automóviles y el smog.
- Ser mayor. La mayoría de los pacientes con enfisema comienzan a desarrollar síntomas más tarde en la vida, generalmente entre los 40 y los 60 años.
Complicaciones del enfisema
El enfisema daña el tejido pulmonar y dificulta la respiración. Es una afección pulmonar crónica, lo que significa que empeora con el tiempo. Si no se trata, esto puede provocar problemas médicos graves, entre ellos:
Ampolla pulmonar. Una hemorragia pulmonar es una pequeña bolsa de aire ubicada entre el pulmón y la superficie externa del pulmón. Si se rompen, el aire atrapado se libera en la cavidad torácica, lo que puede causar otros problemas, como un pulmón colapsado.
Bullae. Un ampolloso es un gran espacio que se forma en los pulmones. Esto reduce la capacidad de los pulmones para expandirse, lo que altera aún más la función pulmonar. Las bullae pueden ocupar hasta la mitad del espacio pulmonar. Al igual que las ampollas, las ampollas pueden romperse y causar un pulmón colapsado.
Pulmón colapsado (neumotórax). Esta es una complicación grave pero poco frecuente. Ocurre cuando el aire entra en la cavidad torácica y ejerce presión sobre el pulmón, lo que hace que colapse. Un pulmón colapsado puede ser potencialmente mortal y requiere atención médica inmediata. Si tiene un pulmón colapsado, es posible que experimente un dolor agudo en el pecho y una dificultad para respirar muy repentina.
Diagnóstico del enfisema
Si tiene síntomas de enfisema, debe hablar con su médico. Ellos pueden proporcionarle un diagnóstico y ayudarle a encontrar un tratamiento que funcione para usted. Su médico comenzará preguntándole acerca de lo siguiente:
- Sus antecedentes familiares.
- Su historial médico.
- Si fuma o no, y con qué frecuencia.
- Cualquier otra exposición relacionada con el trabajo que pueda estar causando sus síntomas.
A partir de ahí, el médico realizará un examen físico, buscará signos de enfisema y escuchará tu respiración. La forma en que los sonidos pulmonares pueden proporcionar una pista sobre la causa subyacente de los síntomas.

Pruebas diagnósticas
Si el médico sospecha de enfisema, también puede recomendar las siguientes pruebas:
- Análisis de sangre. El médico toma una pequeña muestra de sangre para determinar los niveles de oxígeno y dióxido de carbono.
- Exámenes por imágenes. Estas pruebas le permiten a su médico ver el interior de su cuerpo para un diagnóstico adecuado.
- Radiografía de tórax: Una radiografía utiliza haces de alta energía para crear una imagen de su cuerpo. A menos que tengas enfisema avanzado, una radiografía de tórax por sí sola no se puede usar para diagnosticarte. Pero puede descartar otras afecciones, como el cáncer de pulmón.
- Tomografía computarizada: Un escáner de tomografía computarizada toma múltiples imágenes de rayos X para crear una vista transversal del cuerpo. Esto puede ayudar al médico a ver el daño pulmonar y diagnosticar el enfisema.
- Prueba de función pulmonar. Esta prueba mide la cantidad de aire que pueden contener los pulmones y lo bien que puede inhalar y exhalar. Por lo general, esto implica inhalar y exhalar una máquina mientras se siguen las instrucciones de un médico.
Tratamientos para el enfisema
No hay cura para el enfisema y no hay forma de revertir el daño pulmonar que lo causa. Sin embargo, hay una variedad de tratamientos y cambios en el estilo de vida que puede hacer para controlar sus síntomas:
Cambios en el estilo de vida
Estos cambios en el estilo de vida no necesariamente resolverán sus síntomas, pero evitarán daños mayores.
- Deja de fumar. Si fumas y te diagnostican enfisema, el primer paso para el tratamiento es dejar de fumar. Esto evitará un mayor daño pulmonar y facilitará la respiración.
- Evite el humo de segunda mano. Al igual que fumar, la exposición continua al humo de segunda mano significa un daño continuo a los alvéolos. Evite los lugares donde pueda haber mucho humo u otros irritantes pulmonares.
- Use el equipo de protección adecuado, como mascarillas o respiradores, mientras esté en el trabajo.
Medicamentos
Los medicamentos para tratar el enfisema incluyen los siguientes:
- Medicamentos antiinflamatorios. La inflamación de las vías respiratorias es común con el enfisema y puede empeorar síntomas como la dificultad para respirar. Su médico puede recetarle un inhalador que contenga corticosteroides, medicamentos antiinflamatorios fuertes, para aliviar los síntomas.
- Broncodilatadores. Los broncodilatadores son medicamentos que relajan los músculos de las vías respiratorias y facilitan la respiración. Esto reduce la tos y la dificultad para respirar. Usted usará un inhalador para llevar el medicamento directamente a sus pulmones. Dependiendo de la gravedad de su enfisema, su médico puede recomendarle que use el inhalador solo cuando sea necesario o en un horario regular.
- Mucolíticos. Estos medicamentos diluyen la mucosidad de los pulmones y facilitan la expulsión. Su médico puede recetarle esto si tiene tos crónica con mucha mucosidad.
Además de los medicamentos mencionados, su médico puede recomendarle que reciba la vacuna anual contra la gripe. Si tiene enfisema y contrae gripe, es más probable que tenga complicaciones graves. Además, si contrae neumonía u otra infección, deberá tomar antibióticos.
Terapias
Oxigenoterapia
Si tiene enfisema grave, es posible que necesite oxígeno adicional porque su cuerpo no está recibiendo lo suficiente.
Es posible que solo necesite usar oxígeno cuando realice actividades físicas, pero es posible que lo necesite todo el tiempo.
Rehabilitación pulmonar
Esto implica aprender diferentes técnicas y ejercicios de respiración para mejorar su capacidad para hacer ejercicio y realizar actividades diarias. También puede recibir consejos nutricionales y psicológicos para que pueda cuidarse mejor a sí mismo y a su afección.
Cirugía
Si tienes enfisema grave y otros tratamientos no funcionan, el médico puede sugerir una cirugía. Los principales tipos de cirugía para el enfisema incluyen:
Extirpación de ampollas o ampollas. El cirujano extirpará los sacos de aire vacíos para evitar que se rompan y para que los pulmones tengan más espacio para expandirse.
Cirugía de reducción del volumen pulmonar. El cirujano extrae una parte del tejido pulmonar dañado. Esto le da al resto de los pulmones más espacio para expandirse y funcionar de manera más eficiente.
Trasplante de pulmón. Un trasplante de pulmón se considera el último recurso para el tratamiento del enfisema. En este procedimiento, se extirpará el pulmón dañado y se reemplazará por un pulmón de un donante. Hay muchos riesgos asociados con un trasplante de pulmón, como el rechazo. Además, los tiempos de espera para un trasplante de pulmón suelen ser largos, ya que los donantes son pocos y distantes entre sí.
Referencias
Centro Nacional de Información Biotecnológica (NCBI): Biblioteca Nacional de Medicina. Enfisema (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK482217/)
MedlinePlus: Biblioteca Nacional de Medicina. Enfisema (https://medlineplus.gov/emphysema.html)
Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) (https://www.cdc.gov/copd/index.html)