Ciática

La ciática proviene de un problema con el nervio ciático, que se ramifica desde la parte baja de la espalda y las caderas y corre por cada pierna. La ciática causa dolor, debilidad, entumecimiento u hormigueo. Muchos casos de ciática se pueden tratar con éxito sin cirugía.

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Causas de la ciática

Un disco abultado o herniado es la causa más común de la ciática, pero puede surgir de muchas otras causas.

  • Una artritis inflamatoria autoinmune que afecta a las vértebras de la columna vertebral, llamada espondilitis anquilosante o EA, hace que las vértebras comiencen a fusionarse, lo que finalmente ejerce presión sobre el nervio ciático.
  • Los altos niveles de actividad y las acciones diarias, como levantar objetos pesados, torcer repetidamente la cintura o conducir durante mucho tiempo, pueden provocar ciática. Además, hacer lo contrario y llevar un estilo de vida sedentario, como pasar la mayor parte del día sentado, también puede causar daño al nervio ciático.
  • Enfermedad de Paget, un trastorno óseo crónico poco frecuente que suele ocurrir en adultos mayores. Esta enfermedad hace que los huesos crezcan más de lo que deberían, lo que a su vez ejerce presión sobre el nervio ciático.
  • Embarazo, especialmente el tercer trimestre, cuando la postura del cuerpo está descentrada. El exceso de peso del bebé, la expansión del útero o el exceso de líquido pueden presionar el nervio ciático, causando la ciática.
  • Los factores de riesgo físicos, como la obesidad o las personas con diabetes , pueden causar ciática relacionada con el daño a los nervios.
  • Síndrome piriforme, una afección neuromuscular poco frecuente que proviene de un traumatismo en la cadera o los glúteos, la genética o el sedentarismo. El músculo piriforme de los glúteos se irrita y comprime o irrita el nervio ciático.
  • La estenosis espinal es un estrechamiento en el canal espinal debido a la osteoartritis. Los ligamentos engrosados comprimen el nervio ciático, lo que da lugar a la ciática.
  • Traumatismo de la columna vertebral, cualquier accidente o lesión que pueda haber ocurrido en la columna vertebral (accidentes automovilísticos o caídas) que puede dejar fragmentos de hueso rotos o crecimiento excesivo de hueso que presionan el nervio ciático.
  • Los tumores de la columna vertebral, aunque poco comunes, pueden ejercer presión sobre el nervio ciático y causar ciática. Solo las tomografías computarizadas o las resonancias magnéticas los revelan.

¿Cómo se diagnostica la ciática?

Pruebas musculares y de reflejos

Su proveedor de atención médica deberá identificar su patrón de dolor mediante la realización de una serie de pruebas musculares y de reflejos para determinar si su dolor es ciática o no. Estas pruebas de fuerza pueden consistir en levantar las piernas una a la vez, mientras se está boca arriba, o caminar sobre los dedos de los pies o los talones, o levantarse desde una posición en cuclillas. Si el nervio ciático se ha visto afectado, el dolor suele empeorar durante estas pruebas de fuerza.

Si el dolor está presente y se localiza a través del examen físico, se implementará un plan de tratamiento para controlar la ciática.

Ocasionalmente, cuando el dolor es intenso pero no hay otros síntomas, pueden ser necesarias pruebas de diagnóstico por imágenes (radiografías, resonancias magnéticas, tomografías computarizadas o EMG) y bloqueos nerviosos de diagnóstico para revelar la causa subyacente de la ciática, que suele ser hernias discales o espolones óseos.

Tratamientos para la ciática

Medidas de autocuidado

El tratamiento para la ciática comienza con medidas de cuidado personal que pueden incluir:

  • Alternar compresas frías y tibias colocadas en la zona dolorida durante 20 minutos, varias veces al día.
  • La suplementación con magnesio puede ayudar a disminuir la inflamación y mejorar el dolor del nervio ciático.
  • Masaje.
  • Analgésicos de venta libre, como ibuprofeno y naproxeno sódico.
  • Reposo (aunque demasiada inactividad podría empeorar los síntomas).
  • Ejercicios específicos de estiramiento; Evitar rebotes y movimientos bruscos de torsión.

Si las medidas de cuidado personal no resuelven la ciática durante un período de tiempo, su proveedor puede sugerir un tratamiento más complejo, como fisioterapia, medicamentos recetados, inyecciones de esteroides o, como último recurso, cirugía para aquellos con daño nervioso debilitante.

Fisioterapia

A medida que el dolor agudo de la ciática disminuye, su médico o fisioterapeuta creará un programa de rehabilitación para evitar lesiones futuras. La fisioterapia para la ciática consiste en mejorar su condición actual y prevenir otra lesión. La terapia suele incluir la corrección de la postura, el estiramiento y el fortalecimiento de los músculos del tronco y la espalda para recuperar la flexibilidad.

Medicamentos recetados

Se pueden recetar medicamentos para aliviar el dolor ciático. Los tipos de medicamentos que generalmente se sugieren para la ciática:

  • Antiinflamatorios.
  • Medicamentos anticonvulsivos.
  • Relajantes musculares.
  • Narcóticos.
  • Antidepresivos tricíclicos.

Inyecciones de esteroides

Cuando el dolor ciático no se está remediando, los médicos pueden recomendar que se inyecte un medicamento corticosteroide en el sitio de la raíz nerviosa afectada. Las inyecciones de corticosteroides son útiles para reducir la inflamación en el nervio ciático y, por lo tanto, reducir temporalmente el dolor. Sin embargo, los efectos de la inyección de esteroides desaparecen después de unos meses, y el número de inyecciones es limitado debido al riesgo de efectos secundarios graves de los esteroides si se administran demasiadas inyecciones con demasiada frecuencia.

Cirugía

Como último recurso, la cirugía se ofrece para ayudar a los pacientes cuya ciática no ha mejorado con otras terapias. La cirugía es una opción para ayudar a aliviar a las personas con entumecimiento o debilidad continuos de la zona afectada, o pérdida del control de los intestinos o la vejiga. El objetivo final es extirpar el espolón óseo o el disco herniado que está presionando contra el nervio ciático.

Preguntas frecuentes sobre la ciática

¿Cómo se siente el dolor ciático?

Dependiendo de la causa de la ciática, las personas describen su dolor de manera diferente. La mayoría de las veces, el dolor se describe como un dolor agudo y punzante de moderado a severo, similar a una electricidad, que aparece y desaparece a medida que se comprime el nervio ciático. El dolor se extiende desde la parte baja de la espalda hasta los pies, causando debilidad u hormigueo. El dolor puede agravarse por la inactividad o el exceso de movimiento.

Estar sentado durante mucho tiempo, o una tos o estornudo repentinos, pueden agravar los síntomas.

¿Qué causa el dolor ciático durante el embarazo?

La ciática puede ser muy común en el embarazo y, a menudo, aparece y desaparece durante todo el embarazo. Es más común en el tercer trimestre, cuando el cuerpo afloja los ligamentos (para preparar el cuerpo para el parto) y se estira a medida que aumenta de peso.

Las causas de la ciática en el embarazo pueden deberse a la expansión del útero, la retención de líquidos, el aumento de peso de la madre y el bebé y/o la cabeza del bebé a medida que se acomoda en la posición de parto adecuada. Todos estos cambios pueden ejercer presión y comprimir el nervio ciático.

¿Pueden las personas más jóvenes contraer ciática?

La ciática no es solo una afección de los adultos mayores. De hecho, ocurre con mayor frecuencia en personas de entre 30 y 50 años. Obtenga más información sobre las causas y los tratamientos de la ciática.