Reemplazo de articulaciones

La cirugía de reemplazo articular reemplaza una articulación artrítica o dañada por una articulación artificial, llamada prótesis, hecha de metal, plástico y/o cerámica.

Nuestros especialistas realizan cirugías de reemplazo de articulaciones después de que el tratamiento no quirúrgico no le haya brindado alivio del dolor articular y una mejora suficiente en la función articular. La mayoría de nuestros pacientes realizan las actividades diarias mucho más fácilmente después de un reemplazo total de la articulación, y pueden esperar que la articulación artificial dure hasta 20 años y, a veces, más.

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Papá agachado con su hijo pequeñoPapá agachado con su hijo pequeño

¿Qué sucede en la cirugía de reemplazo articular?

El proceso exacto de la cirugía de reemplazo total de articulaciones depende del tipo de articulación, pero por lo general toma solo unas pocas horas y se puede realizar en una de nuestras muchas salas quirúrgicas modernas. Es una cirugía abierta, pero algunos procedimientos pueden ser mínimamente invasivos, como un reemplazo de cadera o rodilla. Su cirujano ortopédico extrae el cartílago y el hueso dañados de la articulación y los reemplaza con componentes protésicos hechos de metal, plástico y/o cerámica.

Podemos realizar una sustitución articular para estas articulaciones:

  • Tobillo
  • Codo
  • Cadera
  • Rodilla
  • Hombro
  • Muñeca

Los reemplazos de cadera, rodilla y hombro son los más comunes.

Riesgos y recuperación

Cualquier cirugía abierta conlleva posibles riesgos y complicaciones, que su cirujano ortopédico le explicará antes de su cirugía. Pueden surgir ciertas complicaciones poco frecuentes con la cirugía de reemplazo de articulaciones, entre ellas:

  • Coágulos de sangre
  • Fractura
  • Infección
  • Lesión nerviosa
  • Problemas de prótesis como aflojamiento o dislocación

Podemos tratar la mayoría de las complicaciones con éxito, y su plan de tratamiento describirá las cosas que debe tener en cuenta a medida que se recupera después de la cirugía.

Su plan de tratamiento puede incluir fisioterapia para ayudar a restaurar la función de su nueva articulación. Un fisioterapeuta trabajará con usted en ejercicios para fortalecer y estirar los músculos alrededor de su nueva articulación, y para ayudar a que su nueva articulación logre un rango completo de movimiento.

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